¿Qué distingue los productos ecológicos de los convencionales?

Cada vez se habla más de volver a los orígenes y no hay nada que describa mejor estos orígenes que los productos ecológicos. En un momento en que la cultura del usar y tirar y la producción industrial en masa están completamente instauradas en nuestra sociedad, debemos poder tener alternativas más slow que ayuden a equilibrar los procesos de la naturaleza y tu propio bienestar.

Volver a las raíces es fácil si existe un conocimiento para hacerlo con responsabilidad y cuidado. Los productos ecológicos son una pequeña contribución que te será muy útil para empezar. ¡Sigue leyendo que vamos a contarte más sobre ellos!

¿Qué distingue los productos ecológicos de los convencionales?

Como ya sabrás, los cultivos ecológicos no usan químicos como pesticidas, herbicidas o fertilizantes. Por una razón muy sencilla, gracias a los pesticidas químicos tendrás una cosecha perfecta y bonita este año, pero el precio a pagar a nivel medioambiental es la disminución de la fertilidad y el aumento del riesgo de erosión del suelo hecho que conlleva a desprendimientos y riesgo de inundaciones al perder la capa fértil del suelo.

En los estudios de largo plazo (20 años) se encuentra que los suelos bajo manejo ecológico presentaron un 75% menos de pérdidas del suelo, mientras que en los suelos fertilizados convencionalmente se registró una tasa de pérdida de suelo tres veces superior al valor de tolerancia máximo (Gomiero et al., 2011). [1]

Además, los insectos, como las abejas, grandes equilibradoras del medioambiente y uno de los polinizadores más importantes de la naturaleza, también se ven muy afectados. Este tipo de tóxicos hacen que mueran de forma masiva perdiendo una gran parte de población.

Las abejas exhiben hipersensibilidad a la mayoría de diferentes pesticidas (especialmente insecticidas).[2]

Las abejas se encuentran muy cómodas en los campos bio gracias a que los recursos florales están continuamente disponibles, hay más pastizales y la maleza es más abundante. Además, el uso de pesticidas es nulo por lo que no sufren ningún tipo de intoxicación. [3]

La agricultura ecológica garantiza una producción sostenible protegiendo el suelo y promoviendo la biodiversidad. Los suelos tienen una mediana de 59% más de microorganismos que los suelos de cultivo convencionales [4] consiguiendo un suelo más fértil y con menos riesgo de erosión.

Los fertilizantes de la agricultura convencional son gran responsables de la contaminación del agua subterránea.

Nuestras aguas subterráneas están contaminadas por la gran cantidad de nitratos que derivan de las granjas y de la agricultura convencional. Datos del Gobierno verifican que la contaminación por nitratos aumentó a más del 50% entre 2016 y 2019.

El Ministerio de Transición Ecológica ha sacado un reciente estudio donde concluye que el 46% de las masas de agua subterránea están contaminadas debido al uso de fertilizantes y el estiércol de las granjas ganaderas.

En los campos certificados como ecológicos no se usan fertilizantes químicos sino otros más sostenibles como el compost. Los abonos orgánicos pueden proporcionar los nutrientes esenciales para las plantas y mejorar la productividad de los cultivos. Este tipo de fertilizante protege la tierra de la erosión y fomenta la creación de microflora y microfauna que ayudan a mantener estables los minerales. También deja un efecto residual beneficioso sobre los cultivos posteriores y mejora la absorción del agua de forma correcta. Evidentemente no contiene químicos por lo tanto el agua subterránea no sufre ninguna contaminación.

¿Todo esto también afecta a tu salud?

Definitivamente sí. Un estudio publicado por Environmental Research en 2019 donde se revisaban 343 trabajos científicos sobre este tema concluyó que una dieta ecológica reduce los niveles urinarios de un amplio rango de pesticidas asociados a efectos adversos para la salud, el desarrollo infantil y la salud reproductiva. Según este metaanálisis, los productos ecológicos contienen cuatro veces menos residuos de pesticidas.

Después de sólo seis días de comer una dieta puramente ecológica, se redujeron significativamente 13 metabolitos derivados de pesticidas, insecticidas y herbicidas detectados en orina.[5]

Según este estudio las verduras y frutas ecológicas tienen un contenido hasta 69% veces mayor de ciertos antioxidantes como los polifenoles. Recuerda que los antioxidantes nos ayudan a proteger las células del estrés oxidativo.

Como ya hemos visto la agricultura ecológica tiene un impacto positivo y muchos beneficios para el medioambiente y nuestro organismo. No genera residuos contaminantes, evita la degradación del suelo y ayuda a preservar los ecosistemas y sobre todo respeta los ciclos de la naturaleza y el equilibrio de esta.

¿A qué esperas para pasarte a lo eco?

Para garantizar un presente y un futuro ecológicos nosotros también nos adherimos a la campaña de Molsa que fomenta los productos ecológicos. Como productores y distribuidores intentamos escoger ingredientes ecológicos, procuramos que nuestras recetas tengan el menor número de ingredientes posibles y cuidamos nuestra manera de envasar los productos eliminando el plástico en la mayor medida posible y priorizando el envase compostable y el vidrio.

La rebiolución la hacemos todas y todos.

Fuentes:

[1] https://www.agroecologia.net/wp-content/uploads/2019/06/Evidencias-cientificas-produccion-ecologica-vd.pdf

[2] http://www.scielo.org.co/pdf/entra/v14n1/1900-3803-entra-14-01-232.pdf 

[3]https://es.bee-life.eu

[4] https://www.bioecoactual.com/en/2017/09/26/more-microbes-in-organic-soil/

[5] Mie et al. Human health implications of organic food and organic agriculture: a comprehensive review. Environmental Health (2017)